En Perú, octubre es sinónimo del Señor de los Milagros, una festividad católica que se extiende por todo el territorio peruano y tiene su origen en Lima. De hecho, es una de las manifestaciones religiosas más populares de Latinoamérica que atrae a miles de visitantes cada año.
Si viajas a Perú en octubre, la procesión del Señor de los Milagros es parada obligada en tu recorrido. Aunque no profeses la fe católica y Perú sea un país laico, esta es una manifestación cultural que vale la pena conocer. En este artículo te contaremos todo sobre la celebración del patrono del Perú.
La historia cuenta que la imagen de este Cristo Moreno fue pintada por un esclavo de origen angolés, en una pequeña pared de adobe en el Barrio de Pachacamilla en el centro de Lima. Los fieles, en su mayoría esclavos, empezaron a congregarse alrededor de la imagen y a rendirle culto, construyendo un pequeño templo alrededor.
Durante el terremoto de 1655 toda la estructura se vino abajo, a excepción de la pequeña pared en la que estaba la imagen. Al ser Lima una ciudad sísmica, esta circunstancia se repitió varias veces a lo largo de los años. En cada terremoto que había, la imagen del Señor de los Milagros quedaba intacta. Esto orignó que la devoción fuera creciendo cada vez más.
El Señor de los Milagros se celebra durante todo octubre. Las procesiones son:
Tradicionalmente, el primer sábado de octubre la imagen sale desde el Monasterio de las Nazarenas en el Centro de Lima para recorrer las calles de la ciudad y llega en la noche al Santuario de las Nazarenas. En la última procesión del 1 de noviembre sale del Santuario e ingresa al Monasterio hasta el próximo año.
Esta celebración es en octubre, en conmemoración de la primera vez que una réplica de la imagen del Cristo recorrió las calles de Lima, luego del terremoto del 20 de octubre de 1687.
En esa oportunidad, el terremoto arrasó Lima y Callao de madrugada, la hermita donde reposaba la imagen quedó destruída, excepto por la pared donde reposaba el Señor de los Milagros.
Gracias a este evento, se ordenó pintar una réplica de lienzo y salir con ella a las calles en procesión. Una tradición que se ha repetido todos los años hasta nuestros días.
El Señor de los Milagros es el Patrón de los Peruanos Residentes e Inmigrantes. Fue procalamado así en 2005 gracias a la veneración de sus feligreses, tanto los que viven en Perú como los que han emigrado, llevando consigo su tradición y celebrándolo cada octubre fuera de las fronteras peruanas.
Actualmente la tradición se celebra en cientos de ciudades y es reconocida por las autoridades locales donde su feligrecía es numerosa. Cada año, miles de peruanos, junto a extranjeros y turistas, se unen para celebrar al Cristo cuya imagen ha permanecido en pie.
Octubre se conoce como el “mes morado” gracias a las monjas de la congregación Madres Nazarenas Carmelitas Descalzas. Ellas son las encargadas de custodiar la imagen del Señor de los Milagros y sus hábitos son morados, como el color del Nazareno.
Cuando pases por las calles del Centro de Lima en octubre notarás adornos de este color, así como personas vestidas de morado en ofrenda a su Patrón.
Pero aunque en Lima hay cofradías del Señor de los Milagros prácticamente en cada distrito, no es el único lugar donde se le venera. Hay hermandades en Huancayo, Piura, Tumbes, Tacna, Trujillo, Arequipa, Iquitos, Huaraz, Huaral, Chosica, Ayacucho, Cañete y Cusco.
En las ciudades con fuerte migración peruana también es común su culto. Se celebra en Estados Unidos, Argentina, Colombia, Chile Bolivia, España, Francia, Panamá, Venezuela, Canadá, Italia, Brasil y Alemania.
Hay tradiciones especiales alrededor de la festividad del Señor de los Milagros que como turista seguro querrás conocer. Por ejemplo, aunque es un dulce tradicional peruano, en octubre se incrementa el consumo de mazamorra morada en honor a la imagen del Cristo.
Además, es el mes del turrón de Doña Pepa otro dulce tradicional con una historia muy curiosa: la señora Josefa Benitez, llamada con cariño Doña Pepa, era una esclava negra en Cañete, no muy lejos de Lima. Un día perdió la movilidad de sus brazos y, al no poder trabajar, fue liberada.
La señora Josefa había escuchado sobre el Señor de los Milagros, entonces viajó a Lima para ver la imagen, participar de la procesión y pedir por su salud. La historia cuenta que Doña Pepa recuperó el movimiento de sus brazos y esa noche soñó con la receta de un dulce a base de maicena y miel.
A la mañana siguiente lo llevó a la celebración de la imagen y lo repartió entre los fieles contando lo que le había ocurrido. A partir de ese momento lo preparó todos los años, luego sus hijos y nietos siguieron la tradición. Hoy en día es común comprar este turrón en cualquier dulcería limeña.
Como esta son muchas las historias de milagros atribuídos a este Cristo Moreno, también llamado Señor de los Temblores por su relación con los terremotos de Lima.
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